
Por Marcelo Brunwald
En Villa Gesell, una ciudad costera emblemática de la provincia de Buenos Aires, se libra una batalla silenciosa pero crucial: la defensa de los médanos costeros, un ecosistema vital que está siendo amenazado por el avance de construcciones inmobiliarias en zonas protegidas.
El abogado Cristian Young, radicado en Mar Azul desde hace cinco años, encabeza una serie de acciones judiciales para frenar obras que, según denuncia, violan leyes provinciales y ponen en riesgo el acuífero del que depende toda la comunidad geselina para acceder al agua potable.
El médano como fuente de vida
Los médanos no son solo parte del paisaje. Cumplen funciones esenciales: filtran el agua de lluvia, alimentan el acuífero subterráneo, y actúan como barrera natural contra las sudestadas. En Villa Gesell no hay red de agua, ni cloacas, ni gas natural. El agua que se consume proviene directamente de ese acuífero.
“La gente no sabe que si se destruyen los médanos, se destruye el sistema que nos da agua. Y sin agua, no hay comunidad”, advierte Young.
Obras sobre zonas prohibidas
Desde 2006, la ley provincial 12.257 prohíbe construir a menos de 150 metros del mar, y en zonas como Mar Azul, esa distancia se amplía a 250 metros. Sin embargo, el municipio sigue autorizando obras que, según Young, violan esa normativa.
En 2022, logró una medida cautelar que detuvo la construcción del complejo Solanas, impulsado por la empresa Avitar S.A. La Suprema Corte de Justicia ordenó no innovar hasta que se resuelva el caso. “No fue un escrache. Fue ajustado a derecho. Pero siguen avanzando con otras obras”, denuncia.

Silencio oficial y presión sobre vecinos
Young asegura que muchos vecinos tienen miedo de denunciar. “Los amedrentan por redes, les mandan inspecciones a los comercios. La gente se calla. Pero hay redes, hay asambleas, hay vecinos que denuncian”, cuenta.
La Asamblea del Médano Costero funciona como espacio de encuentro y resistencia. Las reuniones son esporádicas, pero constantes. “Yo soy abogado de trinchera. No puedo estar en todas las puntas, pero hago lo que puedo”, dice.
Apoyo técnico y político
La Universidad Nacional de Mar del Plata elaboró un informe técnico que respalda la denuncia. Además, Young cuenta con el apoyo del concejal Luis Vivas (La Libertad Avanza) y del exintendente Luis Baldo (UCR), quienes impugnaron el Plan de Ordenamiento Municipal.
“En cuestiones ambientales no hay partidos. Hay que poner los intereses de la comunidad por delante. Y ellos lo hicieron”, reconoce.

¿Cómo puede ayudar la comunidad?
Los vecinos pueden sumarse a la Asamblea del Médano Costero, seguir las actualizaciones en el Facebook de Cristian Young, y participar en las reuniones que se organizan en Mar Azul y Villa Gesell.
“Esto no es solo una causa legal. Es una causa de vida. Si no defendemos el médano, perdemos el agua, perdemos la costa, perdemos el futuro”, concluye.
Esta nota forma parte de una cobertura especial sobre el impacto ambiental en la costa bonaerense. Para más información, testimonios o contacto con los vecinos organizados, se puede consultar la Asamblea del Médano Costero en redes sociales.