El comunicador y escritor recordó sus inicios, habló sobre la magia del radioteatro y destacó la vigencia de la radio como compañía de los pueblos.
En diálogo con nuestro medio, Antonio Villamayor, reconocido comunicador y docente, compartió su mirada sobre la radio en el marco de un nuevo aniversario de este medio que marcó generaciones.
“La radio es imaginación, es el gran teatro de la vida cotidiana. Nos permite reír, emocionarnos, recordar y pensar. Lo que no se ve, la radio lo convierte en imagen para cada oyente”, afirmó Villamayor, con la misma pasión que lo acompaña desde sus primeros pasos.
El entrevistado recordó que fue su abuela Magdalena quien lo introdujo en el hábito de escuchar radio. “Tenía apenas cinco años cuando descubrí que detrás de esas voces había historias y compañía. Desde entonces, nunca dejé de sentir esa conexión afectiva con la radio”, relató.
Villamayor también defendió la vigencia del radioteatro, un género que él mismo impulsó en distintas experiencias. “Un radioteatro no es nostalgia: es la vida misma dramatizada, con personajes y conflictos que nos representan. Es un espejo social que invita a la imaginación colectiva”, explicó.
Por último, subrayó el valor de la radio comunitaria como memoria viva: “La radio narra lo que somos. Es servicio, cercanía y voz de quienes muchas veces no son escuchados. Aunque la tecnología avance, la radio siempre será compañía y testimonio de nuestra vida diaria”.